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Melissa Moliní Bernal
“En el ambiente prefiero utilizar dos tonos y como máximo tres en los elementos de mayor importancia”.
Melissa Moliní es diseñadora de interiores con una amplia formación académica y con gran experiencia en el sector. Pertenece a la Escuela Superior de Diseño Deia en Barcelona. Le encanta el Fen Shui y lo suele aplicar desde un punto de vista racional y funcional, tanto en sus trabajos, como en su vida personal.
Moliní en cada uno de sus diseños y decoraciones trabaja bajo el lema “Menos es más”. Prefiere en un ambiente utilizar dos tonos y como máximo tres en los elementos de mayor importancia, como son las paredes, suelos y muebles.
“Mi forma de mezclar, por ejemplo es emplear el tono de las paredes en grises, muebles blancos y suelo de madera. El color lo suelo dar con objetos efímeros los cuales se pueden cambiar con más frecuencia, como por ejemplo los cojines, alfombras y elementos decorativos”. De esta manera consigue varios objetivos, como es la austeridad, y la atemporalidad.
Considera que es muy importante que las piezas con más representación e influencia en un ambiente o diseño sean atemporales, sobre todo en las viviendas particulares.
Moliní Bernal, ha participado en la proyección y construcción de centros comerciales, locales de ocio y restauración, así como de viviendas para particulares. Proyectos destacados suyos son: La terraza superior del centro comercial L’Ánec Blau en Castelldefells, Cines Megacine en centro de ocio Mágic en Badalona, Centro de ocio Cat en Figueres, Restaurantes Udon en Barcelona, Tiendas de salas de cine de Cinesa-La Maquinista, Zaragoza y San Sebastián.
¡Sigue sus consejos para conseguir una decoración armónica!
Consejos
- Cuando quieres tu hogar: Cierra los ojos y cuando los vuelvas abrir mira los objetos que te rodean pensando en lo que te transmiten; recuerdos, asociaciones, sentimientos, evalúa si realmente quieres que ese objeto siga en tu vida. Quédate con lo que realmente te gusta.
- Para crear un orden y una armonía hay que deshacerse de las cosas que nos sobran y ordenar el resto. Un orden en nuestro entorno creará en nuestro interior paz y calma.
- Momentos de cambio: Hay momentos en nuestra vida en que vemos que nuestra vivienda ya no refleja quienes somos o como nos sentimos. ¡Aprovecha el momento! Cambiar el espacio donde vivimos o trabajamos apoya nuestra personalidad y sobretodo nos ayuda a olvidar viejas costumbres y adquirir nuevos hábitos.
- Busca tu propio sitio, aunque sea tan solo un sillón con una manta y un libro. Hazlo tuyo y de tu intimidad. Reflexiona en el él.
- Concede prioridad a la seguridad y a la comodidad: A veces tenemos muebles del diseñador más de moda, pero no se adapta a nuestro contorno. Somete a tu casa o trabajo a una prueba de seguridad y comodidad observarás infinidad de elementos molestos.
- Caos o desorden: El caos o desorden no son malos mientras vayan acompañados de un proceso de creatividad y sean efímeros. El desorden que perdura en el tiempo hace que nos estanquemos y que se acumule el polvo.
- Equilibrio: Cuando quieras diseñar un espacio busca el equilibrio entre todos los elementos: ni demasiada madera, ni demasiado mármol ni cristal. Busca la justa medida.
- Arte: Rodéate de elementos artísticos, ya sean obras de pintura, dibujos de tus hijos, o una piedra que encontrasteis en la playa. El arte atrae al arte.
